Blog dedicado a la salud y las enfermedades

Semillas

2 September, 2009

Las semillas son fuente de gran cantidad de principios nutritivos esenciales, para el desarrollo sano del organismo, y es lógico que así sea ya que son óvulos fecundados de las plantas y, por lo tanto, depósitos de nutrientes para el crecimiento de la nueva planta. Gracias a las semillas, podemos asegurar, junto con una alimentación sana y completa, la provisión diaria de minerales que el cuerpo necesita para vivir mejor.

Las semillas son sabrosas y aportan calorías, aproximadamente 500 o 600 calorías cada 100 gramos, con la ventaja de que sus dosis diarias mínimas (de 5 a 15 gramos cada una), por lo cual se pueden incluir sin problemas incluso en dietas hipocalóricas. Todas tienen entre 18 y 29% de proteínas, 18 a 20% de hidratos de carbono y de 45 a 60% de grasa vegetales.

Entre las semillas que recomendamos incorporar a la dieta, por su gran cantidad de principios, se encuentran:

Semillas de calabaza: estas deliciosas semillas aportan zinc y hierro; como el zinc es importante para el buen funcionamiento de las glándulas sexuales y el páncreas, se la utiliza en caso de desordenes prostáticos y también en casos de diabetes. Es utilizada , además, como antiparasitario; la dosis es de 50 semillas durante 8 días. Las semillas de calbaza, son muy ricas en grasas insaturadas y por ello, no deben tostarse a más de 60°, por eso recomendamos que se sequen al sol.

Girasol: son especialmente ricas en vitamina B, hierro, manganeso, cobre, calcio, ácidos grasos insaturados, especialmente Omega 6.

Lino: esta semilla es un excelente laxante, que actúa sin irritar la mucosa intestinal; por el contrario es útil en las gastritis por su poder demulcente, o sea que suaviza y desinflama la mucosa. Su contenido en ácidos grasos poliinsaturados le da la propiedad de disminuir el colesterol. Es uno de los alimentos ricos en ácido linolénico, poco usual en los vegetales. Por su contenido de fibra soluble es útil en la diabetes colaborando para disminuir los niveles de glucemia. No es conveniente aumentar la dosis más allá de tres cucharadas soperas a diario.

Sésamo: Es muy rico en proteínas (18%), en ácidos grasos poliinsaturados Omega, y en lecitina, por lo cual ayuda a disminuir el colesterol; es bueno como tónico para el sistema nervioso y mejora la memoria. Contiene calcio, fósforo, magnesio y hierro; vitaminas B1 y B2, E, y mucílagos, por lo cual es útil para regularizar suavemente el tránsito intestinal. Es un alimento del que se obtienen numerosos subproductos: aceite, tahine, que se obtiene de moler finamente las semillas ligeramente tostadas y mezclándolas con agua para obtener una crema que se puede en pan, gomasio, que es la mezcla de semillas con sal marina, apenas tostadas, y molidas se junta una parte de sal marina y 10 de semillas. La semilla de sésamo es muy rica en calcio (116 mg cada 100 g). Su absorción es alta, similar al calcio del yogur, especialmente si se trata de sésamo pelado, además es rico y puede ser una excelente colación o snak. Esto sumado a su riqueza mineral alcaliniza la sangre y remineraliza el organismo.

Grasas (Parte II)

1 September, 2009

Grasas (parte I)

1 September, 2009

A diferencia de lo que se cree, las grasas no son siempre malas y por el contrario, son nutrientes esenciales para nuestra buena salud. La mielina, que sostiene y aísla el sistema nervioso, el cerebro, la médula, el hígado, el páncreas y las glándulas contiene ácidos grasos en su estructura, es por eso que no se les debe restar importancia. Las grasas son necesarias para la síntesis de hormonas y prostaglandinas, para la transmisión del impulso nervioso, para la permeabilidad celular e además porque inciden directamente en la nutrición y la expulsión de los desechos de la célula; son necesarias para el aporte y la absorción de las vitaminas liposolubles.

Las gasas se clasifican en:

Saturadas: casi en su totalidad se encuentran en el reino animal (en las carnes, fiambres, lácteos, yemas de huevo) y algunas en el vegetal (coco, chocolate, maní). Estas grasas son sólidas a temperatura ambiente. Cuando se ingieren en grandes cantidades son perjudiciales para el organismo, ya que se depositan en el tejido adiposo, colaboran en el aumento de peso, y agravan las dislipemias  (grasas presentes en la sangre), con aumento de colesterol y triglicéridos, de diabetes y de enfermedades metabólicas. Son además difíciles de digerir, ya que inhiben la secreción de los jugos gástricos.
Como son de origen animal, el ser humano es capaz de producirlas y por ende no es necesario aportárselas al cuerpo.
Incluso se ha podido demostrar que estas grasas aumentan la probabilidad de padecer algunos tipos de cáncer.

Grasas insaturadas
Son de origen vegetal, se encuentran en las semillas, (girasol, uva, maíz, oliva, lino, soja) y en las frutas secas (almendras, avellanas, nueces, pistachos, maní).
Entre las grasas vegetales hay dos ácidos grasos que el organismo humano no puede sintetizar y por lo tanto deben incorporarse a través de los alimentos; ellos son los ácidos grasos linoleico y linolénico, más conocidos como Omega 6 y Omega 3.

Los aceites industriales se extraen mediante la aplicación de temperatura y solventes; si bien este proceso de refinación permite una mayor extracción, los ácidos grasos esenciales se saturan, y ya no posee tpodas las características que los hacen esenciales. Las margarinas, por ejemplo, son grasas vegetales que se hidrogenan para transformarlas en sólidas; una parte de sus moléculas cis se transforman en trans; en este proceso la molécula realiza una rotación espacial sobre su eje, de tal forma que no puede integrarse en la cadena metabólica; estas, no son reconocidas por el organismo, aumentan el colesterol, y a esto se le debe agregar la deficiencia de los ácidos grasos esenciales y vitaminas liposolubles. Es por ello que recomendamos el consumo de aceites prensados en frío, de primera presión, vírgenes. Son aceites que deben conservarse a resguardo de la luz, del oxígeno y del calor para mantener sus propiedades.
Las grasas vegetales pueden ser:
• Monoinsaturadas: que disminuyen el colesterol LDL o sea, el colesterol dañino. Frenan la síntesis de colesterol endógeno, el sintetizado por el hígado en exceso. Se encuentran en el aceite de oliva prensado en frío; tienen además efecto colagogo, mejorando el funcionamiento de la vesícula biliar. Otras fuentes son aceitunas, maníes, palta, aceite de soja.
• Poliinsaturadas: que son grasas que forman parte de las membranas celulares; intervienen en su flexibilidad y permeabilidad. Son además necesarias para la síntesis de prostaglandinas. Las prostaglandinas son sustancias derivadas de los ácidos grasos poliinsaturados.

VIH

1 September, 2009

El VIH (virus de inmunodeficiencia humana), es una infección por virus que causa un fallo total del sistema inmunológico del cuerpo.
Debido a la presencia en el organismo de este virus, el sistema inmunológico no puede producir anticuerpos contra infecciones y contra el cáncer, viendose vulnerable a multiples enfermedades.
De este virus hay dos tipos principales, 1 y 2.
Se calcula que en la actualidad existen entre 30 y 40 millones de personas están infectadas en todo el mundo, y que es la causa más común de muerte en hombres de 25 a 44 años.

Las formas de contagio son:
• Relaciones sexuales sin protección
• Uso de agujas o inyecciones contaminadas
• Contacto con sangre infectada
• Por semen contaminado con el virus
• Transmisión madre – hijo en el momento del parto.

El VIH no se contagia casualmente, por darse la mano, besarse, tomar del mismo vaso, etcétera, sino que es necesario que se este en contacto de fluidos contaminados.
 Aquella persona que padece esta enfermedad no es en ninguna medida un riesgo para la población, solo se debe tener en cuenta no contagiarse de la manera ya especificada.
En un principio esta patología no presenta síntomas significativos, puede confundirse incluso con una gripe leve, pero luego de los 6 u 8 meses, donde ya se detectan los anticuerpos en la sangre, el paciente se siente bien, pero la infección avanza en su organismo. Es esta etapa se administran medicamentos para reducir la cantidad de virus y retrasar la aparición del VIH. Luego de esto, lo que sigue es el avance progresivo de la enfermedad, donde las defensas del organismo están debilitadas y el virus ataca las células nerviosas dando lugar a síntomas como fatiga, perdida de peso, infecciones varias, las cuales responden poco o nada a los tratamientos convencionales.
• Lo que se debe evitar es el intercambio sexual promiscuo sin el uso de profilácticos.
• Deben tener especial cuidado aquellas personas que trabajen en hospitales y laboratorios, y manipulen agujas, sangre y fluidos contaminados.
• En el caso de portadoras de VIH embarazadas, deben tomarse las medidas necesarias para que al momento del parto el bebe no contraiga la enfermedad.
• El intercambio de jeringas en el consumo de drogas intravenosas, es un factor de riesgo ya que el portador comparte su jeringa con quienes quizás estén sanos.

Hasta el momento la infección no tiene cura, pero sí existe tratamiento, hay control de la enfermedad con medicación que evita el avance de la misma.
Los tratamientos actuales, que combinan tres o más medicamentos antivíricos, como zidovudina, inhibidores de la proteasa e inhibidores no nucleósidos de la transcriptasa inversa que consiguen detener o bien frenar la el avance de la enfermedad.
Si bien es una enfermedad incurable, sus síntomas pueden ser reducidos y la enfermedad puede que no se desarrolle con la medicación adecuada, en 5 a 15 años, después de dar positivo el virus VIH.
La esperanza de vida de las personas con VIH aumentó en 13 años con la terapia combinada con atirretrovirales y la mortalidad se ha reducido.

El virus de la inmunodeficiencia humana (VIH) surgió en África a principios del siglo XX, procedente de los chimpancés, pero el VIH, por causas que aún se desconocen, esperó hasta los años 70 para hacerse con la especie humana y expandirse de un modo drástico.

Varicocele

31 August, 2009

Calcio

31 August, 2009

El calcio es un mineral esencial, necesario en todas las etapas de la vida. Su requerimiento y asimilación varía según la edad. Así, por ejemplo, los adolescentes necesitan un mayor aporte por el desarrollo del esqueleto, de los músculos y del sistema endocrino. Una vez alcanzada la altura máxima, el hueso continúa aumentando su densidad y espesor, pero una vez transitada esta etapa el requerimento es estable, aunque en la vejez, el calcio es fundamental para cuidar los huesos de la osteoporosis. Asimismo durante el embarazo, el calcio es de vital importancia para la formación del bebe. Se estima en líneas generales que el pico de masa ósea se alcanza entre los treinta y cuarenta años. A partir de los cincuenta años comienza a disminuir.
En la menopausia se produce una disminución en la síntesis de estrógeno, la hormona secretada por los ovarios. Esto ocasiona que la absorción de calcio disminuya también, y que se elimine con mayor facilidad; por esta razón se pierde más fácilmente masa ósea, y se puede presentar la osteoporosis. Por lo tanto, el requerimiento en este período de la vida es mayor, alrededor de los 1500 miligramos. Las personas mayores de 60 años requieren también mayores cantidades de calcio, ya que deben cuidar sus huesos.

En este período el riesgo de sufrir osteoporosis aumenta. Además de la ingesta de calcio, hay otros factores que inciden en la génesis de esta afección:
1. la cantidad de las proteínas de la dieta. Cuando hay un exceso de proteínas disminuye la absorción.
2. el contenido de sal de la dieta, ya que aumenta la eliminación
3. la irritación de la mucosa gastroduodenal, que produce una deficiente absorción.
4. una alimentación muy acidificante, que requiere un mayor gasto de calcio para equilibrar el pH sanguíneo.
El mayor factor para disminuir el riesgo de sufrir osteoporosis es la alimentación equilibrada con un aporte abundante de vegetales y frutas para disminuir la acidosis, junto a una actividad física moderada.
Los alimentos que contienen azúcar blanca, tan común en las golosinas y la alimentación infantil, son altamente acidificantes y generan por su acidez, un mayor gasto de calcio.

Para evitar la carencia de calcio, y por consiguiente todos los problemas que esto conlleva, sería útil:

• Aportar suficiente calcio mediante la inclusión en la dieta de semillas de sésamo pulidas, muy ricas en calcio y de fácil absorción; almendras y avellanas; algas; dos tazas de verduras crudas a diario y media cucharadita de cáscara de huevo molida.
• Aportar suficiente vitamina D, tomando sol e incluyendo en la dieta, palta, salmón y arenque.
• Consumir frutas, jugos y verduras crudas para disminuir la acidez del organismo y su demanda de minerales.
• Aportar sílice, un mineral que actúa facilitando el deposito de calcio en el hueso, a través de la cola de caballo, los cereales integrales, la cebolla, el ajo y la tela que cubre por dentro la cáscara del huevo.
• Consumir alimentos ricos en magnesio, frutas secas, legumbres, avena, higos y dátiles.
• Mejorar la absorción, quitando de la dieta alimentos irritantes como té, mate, café, chocolate, condimentos picantes.
• Practicar alguna actividad física.
• Remplazar las carnes rojas por la soja, ya que disminuye la excreción del calcio por la orina

Algas

28 August, 2009

Las algas son organismos vegetales unicelulares que se clasifican por su color; en algunas comunidades orientales son alimentos de uso diario, que se ingieren en pequeñas cantidades. Las algas más conocidas y utilizadas son:

Fucus: que es un alga parda; sus pigmentos de color marrón tapan el color verde de la clorofila. Es rica en yodo; aporta potasio, sodio, cloro, magnesio, hierro, calcio, y sílice. Contiene ácido algínico que tiene un suave poder laxante; y como retiene agua, se utiliza para aumentar el nivel de saciedad en dietas hipocalóricas, tomándola con mucho agua.

Kombu: es un alga de color oscuro, rica en hidratos de carbono y fibra. También es rica en minerales como el fósforo, calcio, sodio y especialmente yodo. Contiene vitamina A y B1, B2, B3, y B12. Tiene una hoja ancha y gruesa.

Hiziki: es un alga roja, muy rica en calcio y hierro. Contiene 1400 mg% de calcio y 29mg% de hierro. Es muy rica en B3 y contiene B12. Como tiene arsénico en su composición, no debe incluirse diariamente en la dieta, sino solo dos o tres veces por semana.

Nori: es un alga muy rica en proteínas y en vitamina A. Es utilizada especialmente en anemias. Contiene fósforo y B3 en abundancia. Se vende deshidratada y molida, lo cual permite incluirla directamente en ensaladas.

Wakame: contiene abundante vitamina B, proteínas y sodio. Debe tenerse precaución en caso de hipertensión.

Kanten o Agar-agar: se presenta en forma de polvo que al cocinarse se transforma en gel. Con ella se hacen gelatinas naturales. Es útil en caso de constipación y colon irritable. No tiene mucha riqueza mineral aunque provee calcio y hierro.

Las algas ricas en yodo deben comerse con cuidado en casos de hipertiroidismo e hipotiroidismo cuando toma medicación, en el embarazo, y en la niñez, ya que pueden influir en el desarrollo de la tiroides.
Debe tenerse cuidado también en casos de hipertensión por la riqueza de sodio de las algas. El fucus puede ocasionar acné en personas sensibles. Con las algas pueden enriquecerse platos de cereales, sopas y ensaladas, en pequeñas cantidades. Son muy útiles en la alimentación debido a su riqueza mineral.

La espirulina es un alga de agua dulce. Es un organismo unicelular, que forma el plancton de algunos lagos situados en México, Japón, Tailandia y África. Esta alga es rica en proteínas, y contiene ocho aminoácidos esenciales. Además posee vitamina B12 y ácido gamalinoléico, poco frecuente en los alimentos. Se utiliza en regímenes para adelgazar por su contenido en el aminoácido fenilalanina, que disminuye el apetito. Es rica en mucílagos, teniendo efecto laxante suave a la vez protege a la mucosa gastrointestinal. Como otras algas, es rica en minerales (selenio, cromo, zinc, fósforo, calcio, magnesio, hierro) y vitaminas (beta carotenos B1, B2, B3, B5, B6, B8, E). Como las algas marinas, no deben ingerirse durante el embarazo, al igual que no deben ingerirlas personas con trastornos de gota o ácido úrico elevado.

Lácteos

28 August, 2009

Fundamentales para una vida sana, los lácteos son sin duda una fuente de calcio inigualable que debe incorporarse desde la primera infancia. su vital importancia en nuestra alimentación da sus frutos y nos permite disfrutar de una vida más plena.

La leche es rica en proteínas de alto valor biológico, grasas emulsionadas de digestión facilitada, lecitina, colesterol, y lactosa, el azúcar de la leche. Provee vitaminas A y D, y entre los minerales calcio, fósforo, potasio, cobre y muchos otros en pequeñas cantidades. La principal proteína es la caseína. En el suero contiene otras proteínas: albúminas y globulinas. Estas proteínas son de muy buena calidad y por ello muy buenas para sintetizar nuevos tejidos. Es una fuente abundante de calcio, aunque la absorción es mayor en yogures, quesos y leches en polvo.

El yogur es una leche acidificada. Luego de la esterilización, se siembran distintas cepas de bacterias que, al producir fermentación, transforman la lactosa en ácido láctico. Estas bacterias impiden el desarrollo de gérmenes indeseables. Hoy se sabe que el yogur es útil para mejorar o recomponer la flora intestinal en casos de disbacteriosis después de una diarrea, estreñimiento, gases, colon irritable, etcétera. El yogur puede elaborarse también a partir de leche de soja.

El yakult es otro producto lácteo fermentado con lactobacilos vivos muy beneficiosos para la salud, ya que por un proceso especial estos bacilos llegan vivos al intestino; es especialmente útil en colon irritable, diarreas, estreñimiento, gastritis, inflamación, gases, artritis, enfermedades autoinmunes. Su acción consiste en poblar al intestino de buena flora, los lactobacilos Casei Shirota, que inhiben las bacterias patógenas y normalizan el funcionamiento intestinal elevando las defensas naturales del organismo.

Los quesos se obtienen por la coagulación de la caseína, proteína de la leche, con fermentos ácidos. El coagulo se separa del suero, se lo filtra y luego se lo prensa. Este suero se puede calentar para obtener así otras proteínas lácteas, como la ricota.
Los quesos son muy ricos en proteínas completas de alto valor biológico, en calcio, y también en grasas saturadas y colesterol. Respecto del calcio, contienen gran cantidad, aproximadamente 700 mg cada 100 gramos y se absorbe más fácilmente que el de la leche fluida.
Las personas con hipertensión arterial deben tener cuidado en el consumo de quesos maduros por su alto contenido de sal y grasas saturadas, aproximadamente un 30%. Por otra parte las personas que toman medicamentos antidepresivos deben abstenerse de comer quesos maduros ya que pueden ocasionar una elevación de su presión arterial por su riqueza en una sustancia hipertensora, la tiramina.

Debemos mencionar también que la leche posee antígenos, es decir que sus proteínas de gran tamaño podrían funcionar como antígenos. Sumado a esto, el intestino tiene una función fundamental en la protección del cuerpo, no dejando que penetren antígenos en la sangre. Para ello cuenta con un anticuerpo llamado inmunoglobulina A, este anticuerpo se segrega de la mucosa del intestino, pulmones y otros órganos. 

Por su parte la leche materna aporta al bebé proteínas más sencillas de digerir, y en menor cantidad, la inmunoglobulina A que necesita para el desarrollo y el normal funcionamiento del intestino y del sistema respiratorio. La leche de vaca puede ocasionar trastornos al lactante si aún no cuenta con su sistema inmunológico maduro. Recuerde que el amamantar contribuye en muchisimos aspectos al niño, desde el vinculo con la madre, el cual se verá favorecida hasta la salud y el no contraer obesidad durante la primera infancia.

Frutas secas

28 August, 2009

Las frutas aportan muchos nutrientes, saciedad y vitaminas a nuestro organismo, es por ello, que tanto frescas como secas son de crucial importancia al bienestar integral de nuestro organismo.

Las frutas secas son semillas y como tales, son depósitos de reservas para el desarrollo de la planta; por lo tanto, como hemos afirmado en el apartado de “semillas”, son muy ricas en nutrientes.
Se pueden dividir en:
• Farináceas o no oleosas: como las castañas
• Oleosas: como las almendras, avellanas, maní, nuez, y los pistachos.

Las del primer grupo son ricas en hidratos de carbono y pobres en proteínas y grasas; mientras que las del segundo grupo son ricas en proteínas, aunque tienen bajo contenido en algunos aminoácidos (lisina, treonina y azufrados); de todas maneras, se consideran fuente de proteínas de alto valor biológico. Son ricos en minerales: magnesio, manganeso, fósforo, zinc, cobre, selenio, potasio y hierro, además de vitaminas B1, B2, B3 y E.
Las almendras y avellanas son muy aconsejables de consumir al menos un puñado a diario, ya que son ricas especialmente en calcio, fósforo y magnesio. Entre todas, la almendra es la que más calcio aporta, y aunque su absorción no es muy alta, es una fuerte alternativa importante sobre todo cuando no se consumen lácteos.
El maní es muy rico en vitamina B3, niacina. Todas son ricas en fibras y en grasas vegetales que aportan ácidos grasos esenciales, con importantes beneficios para el sistema circulatorio y el organismo en general. Las nueces son más ricas en cobre, ácidos grasos Omega 6 y aportan una buena cantidad de Omega 3, ambos esenciales. Las almendras y avellanas aportan principalmente ácidos grasos monoinsaturados, pero tienen un potente efecto hipocolesterolémico.

Si bien aportan calorias, su valor energetico, de saciedad y nutrición es muy elevado y de excelente calidad, por ello se deben incluir en todas las dietas, incluso en as de descenso de peso, aunque en menor cantidad.

Legumbres

28 August, 2009

Las legumbres son un grupo de alimentos muy importantes, sanos y nutritivos. Este grupo alimenticio aporta abundantes proteínas vegetales, y se encuentra formado por lentejas, garbanzos, porotos, soja, arvejas y habas. La soja es el reemplazo ideal de las proteínas de la carne, ya que contiene los ocho aminoácidos esenciales y su valor biológico es similar al de la carne vacuna. Las otras legumbres tienen proteínas incompletas, o sea que para que el organismo humano pueda sintetizar tejido a partir de ellas, deben ser complementadas con otros alimentos que provean los aminoácidos faltantes o disminuidos.
Al ser pobres en aminoácidos azufrados, las legumbres mejoran la retención de calcio en el organismo, a diferencia de las proteínas animales.
Los porotos son ricos en ácido fólico, que previenen los defectos del tubo neural en el recién nacido; por lo tanto, es de suma importancia la incorporación de legumbres en al alimentación de la embarazada hasta la cuarta semana de gestación. Lo ideal sería asegurar un buen aporte de ácido fólico aún antes de la concepción.
Debido a su contenido de fibra, taninos y ácido fítico, las legumbres tienen índices glucémicos muy bajos. Por esta razón constituye un excelente alimento para los diabéticos. Los fitatos presentes en las legumbres reducen la biodisponibilidad de los minerales impidiendo en parte su absorción. Sin embargo, últimamente se han descubierto otras importantes acciones del ácido fítico, tales como la reducción de riesgos de cáncer de colon por su poder antioxidante.
Las legumbres son ricas también en hierro, aunque no se absorve tan fácilmente. Para mejorar este aspecto se debe consumir vitamina C.
Las proteínas de las legumbres no aumentan el colesterol como si ocurre con las de origen animal, y muy por el contrario estas favorecen la eliminación del colesterol ya existente en nuestro organismo.
Con respecto a la soja, podemos decir, que es rica en grasas insaturadas, lecitina y vitamina E. Su valor biológico es muy alto, un poco mayor que el de la carne. La lecitina presente en la soja, es un fosfolípido que contiene colina e inositol; es emulsionante de las grasas y del colesterol; es además un excelente suplemento para el hígado, y la colina es útil cuando se necesita mejorar la memoria.
La soja es rica en fibra y contiene también como las otras legumbres, ácido fítico.
Es muy rica en fitoestrógenos; por lo tanto modula la reacción de los estrógenos, disminuyendo el riesgo de padecer cáncer de mama. Mejora los síntomas de la menopausia. Contiene isoflavonas, la genisteína, que bloquea el desarrollo de tumores, en especial de mama y colon, y es preventivo de las patologías prostáticas. Otro flovanoide, la diadzeína, previene y mejora la osteoporosis ya que aumenta la densidad mineral ósea, principalmente en la columna vertebral.
Las isoflavonas son fitoestrógenos que además protegen el sistema cardiovascular inhibiendo la formación de placa ateromatosa, disminuyendo la fracción LDL del colesterol (o colesterol malo) y aumentando la fracción HDL (colesterol bueno). Todas estas propiedades se mantienen en sus subproductos y sobretodo en el miso.

Así cada legumbre aporta distintas proteínas vegetales y numerosos beneficios, lo importante de todo ello es ir incrporandolo en la alimentación desde temprana edad para evitar afecciones y disfrutar de una vida más sana.