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Celulitis (parte I)

30 July, 2009

La celulitis es una acumulación de toxinas atrapadas, que el cuerpo ha ido almacenando, y que permanecen en líquido dentro de las células grasas.
Los líquidos no eliminados por nuestro organismo, se alojan en las células grasas, inflamándolas; esta inflamación es conocida como celulitis o piel de naranja, cuestión tan desagradable para la mayoría de las personas que la padecen, en su mayoría, mujeres.
Si bien esta patología es muy antiestética, no sólo de eso se trata. 
Afecta fundamentalmente en su fase no infecciosa a las mujeres en un 95% de los casos, con mayor ó menor extensión y localización y aparece a cualquier edad, incluso en la pubertad.

En su primer estadio esta patología es solo estética, aunque puede presentar nódulos de grasa bien definidos y marcados en glúteos, nalgas, muslos brazos y hasta rodillas, no genera dolor sino una sensación desagradable para la paciente.
En los casos más avanzados, suelen presentarse cierto malestar y dolor en la zona por la presión, el roce o el calor, lo cual complica más el cuadro.
Al tacto se nota la tensión de la zona; a la presión, como granulosa y al pellizcar, dolor.
En estos casos extremos pueden aparecer componentes psíquicos, como ansiedad o depresión.
Lo mejor para evitar el avance de esta patología es mejorar la circulación de la zona afectada, para ello es muy recomendable caminar, hacer ejercicio y tratar el problema, para evitar que la enfermedad avance con rapidez.
A medida que avanza la edad, puede que la celulitis se incremente, pero ello no indica que el pronóstico sea malo, mientras no allá aparejada una infección.

Las medidas generales para evitar el avance son:

  • Ejercicio físico diario.
  • Evitar golpes en las zonas donde esté presente.
  • No llevar ropa muy ajustada.
  • En casos de dolor, baños de agua templada, aplicación de calor si hay infección.
  • Antibióticos si se presenta infección.

Asimismo recomendamos leer Celulitis (parte II), y subsiguientes, allí encontrará como tratar y atacar esta patología y diferentes planes de alimentación y ejercicio que favorecerán su circulación y la estética de sus piernas.
Recuerde que es una cuestión de salud y si bien la estética es importante, no siempre garantiza que el paciente este sano por dentro, lo cual es primordial.

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